19/7/12

Recreación



Me recreo ante tu cuerpo como ante un paisaje
imprevisto. Me sorprende verte en la desnudez juvenil,
y ansío recorrerlo, como una anhelada geografía.
Me ves pensando en la umbría vegetal de algunas
grutas, o en el agua del muslo donde brillan las venas.
Me perderé en un bosque que cruzo con mis manos,
y pediré una larga estepa donde los labios hablen.
Me ves sorprendido, anonadado, pensando en habitarte.
Y tú, mientras, te abandonas al cálido primor del aire.
Te dejas en la luz, que te navega; y si miro tus ojos
vuelvo al jardín oscuro donde es verano el verde.
Te miro otra vez y casi no te creo posible. Fulges,
encantas, guarda tu cuerpo el hechizo insabido de la tierra.
Y despacio sonríes al irme yo acercando, atónito,
hacia ti mientras el sol nos cubre con su luz, nos desdibuja,
y nos va metiendo en la calma inmensa y rubia de la tarde.
Luis Antonio de Villena
Imagen:Mara Light


2 comentarios:

Clarissa Rodriguez dijo...

Un apasionado poema.

Me llama la atención la cuidadosa descripción de la escena, que parece más hermosa por las palabras usadas.
Todo es muy estético y por esa misma razón, creo que también es fugaz.

Un abrazo.

Odel dijo...

Si Clarisa yo lo encuentro mu descriptivo y sensual
Gracias spor tu visita
Abrazos